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En ocho años en el poder, la fortuna de Juan Orlando Hernández y su familia se incrementó de manera exponencial.
Según una investigación publicada por el CNA en el 2022, la exfamilia presidencial registró al menos 109 bienes inmuebles y 11 empresas, además de 267 millones de lempiras en inversiones en sociedades mercantiles durante los años de JOH en la silla presidencial.
Entre los bienes inmuebles se encuentran casas, apartamentos, terrenos, fincas, haciendas, edificios y locales comerciales. Algunos de estos bienes fueron adquiridos en conjunto con sus hermanos, Hilda (fallecida), Tony y Aixa, o con su esposa, Ana García.
Entre las empresas se destacan Inversiones Ducal Hernández Alvarado, una sociedad de proyectos inmobiliarios y turísticos; Inversiones del Río, una empresa agropecuaria; y una constructora que ha participado en obras públicas como el teleférico y el metro de Santo Domingo.
La radiografía del CNA, ambientada con información de los portales digitales Criterio.hn y Pasos de Animal Grande, titulada “La caída de un presidente”, describe que Hernández y su entorno familiar cercano amasaron una fortuna integrada por 109 bienes inmuebles, 11 empresas y 267 millones de lempiras comprendidos en inversiones en sociedades mercantiles.
Estos bienes e inversiones se distribuyen entre la capital Tegucigalpa y los departamentos de Lempira y Olancho, de donde son originarios.
La investigación también señaló que la exprimera dama, Ana García, vendió una casa en Miami, Estados Unidos, en noviembre de 2019, por un valor de 1.2 millones de dólares.
Asimismo, el CNA indicó que Tony Hernández fue sacado de Inversiones del Río en 2017, un año antes de entregarse a la justicia estadounidense, pero que el Ministerio Público nunca confiscó los bienes a favor de esa empresa.
La fortuna de JOH y su familia contrasta con la realidad de pobreza, desigualdad y violencia que vive la mayoría de la población hondureña. Según el Banco Mundial, el 48.3% de los hondureños vive en pobreza y el 14.7% en pobreza extrema. Además, Honduras tiene una de las tasas de homicidios más altas del mundo, con 38.9 por cada 100 mil habitantes en 2020.
Según el CNA, los bienes de JOH están diseminados en las ciudades de Tegucigalpa, Gracias, Lempira, y en el departamento de Olancho.
“La aparición de las familias Hernández Alvarado y García Carías en escándalos de corrupción, y nexos con el narcotráfico deja entrever el hecho de cómo en tan poco tiempo lograron obtener tantas propiedades en Honduras y en el exterior”, reza el informe del CNA.
Juan Orlando Hernández nació el 28 de octubre de 1968 en la ciudad de Gracias, departamento de Lempira. Es el número 15 de 17 hermanos, según la BBC.
Completó sus estudios en el Liceo Militar del Norte, en San Pedro Sula, de donde egresó con el grado de subteniente de infantería para inmediatamente después cursar estudios de derecho en la capital, en la Universidad Nacional de Honduras
El Departamento de Justicia estadounidense publicó la acusación completa contra el exmandatario, del que dice que formó parte de una conspiración para transportar más de 500 toneladas de cocaína hacia Estados Unidos.
“Hernández abusó de su posición como presidente de Honduras entre 2014 y 2022 para operar el país como un narco-Estado”, dijo el fiscal general de EE.UU., Merrick Garland, en una rueda de prensa en Washington.
Antes de ser extraditado, Hernández aseguro que los criminales y narcotraficantes encontraron la “llave mágica” refiriéndose a las acusaciones en su contra desde Estados Unidos.
JOH sostuvo que las armas más efectivas para la lucha contra el narcotráfico han sido la extradición y la colaboración con el gobierno de los Estados Unidos.
“Tomé la iniciativa en la lucha para aprobar la extradición, lo hicimos a pesar de muchas voces opositoras, nadie involucrado con el narcotráfico lucharía por aprobar la extradición”, acotó.
De acuerdo con la Cuenta Desafío del Milenio (MCC), Honduras tuvo un retroceso del 18% en cuanto al control de la corrupción durante los años de JOH en el poder.
MCC argumentó que cuando Hernández asumió su primer mandato, TI calificó a Honduras como uno de los países más corruptos del mundo, ubicándolo en el puesto 126 de 175 naciones, con 2.9 puntos sobre 10 (cero es la peor calificación).
Ocho años después, la puntuación bajó a 2.4 puntos, pasando a formar parte de los 23 países con menos transparencia a nivel mundial.
”JOH” durante un audiencia con el juez Kevin Castel alegó la falta de recursos económicos para costear abogados privados.
Su esposa, Ana García de Hernández, confirmó la “difícil situación financiera” en una entrevista con el periodista Darío Banegas.
Cuando se le cuestionó sobre la veracidad de la falta de fondos, García admitió: “Es real esto que no tienen dinero para pagar un abogado y por ello han solicitado un abogado de la defensa pública”, reveló.
La limitación de recursos económicos se agravó por la incautación de propiedades y bienes que la pareja experimentó. García explicó, “Acuérdese que a nosotros nos incautaron nuestras propiedades, incautaron lo que teníamos, esa es nuestra realidad”.
Debido a su situación econónima, JOH pidió al juez Kevin Castel un abogado público. Días después fue nombrado Renato Stabile para acompañar en la defensa de Raymond Colon.
Fuente: laprensa.Hn